Cabot Circus.

Nos recorremos todas las librerías que existen buscando material, que es mucho más barato que en España.

De vez en cuando, entramos en alguna tienda de juguetes, como ésta que está en Cabot Circus; pasado el distrito de Broadmead.

Y he aquí que me encontré con alguien que me dijo que quería venirse conmigo a España.

Se llama Freddy.

No sé por qué, pero mi compañera Eva se marcha hacia la zona de las cajas de pago. (Creo que le da un poquito de vergüenza que el mono me esté hablando en alto. Y que yo le conteste...).